domingo, 23 de noviembre de 2014

Una disculpa y muchos agradecimientos



Lo primero es lo primero y en este caso corresponde pedir disculpas y hacerlo lo más claro posible, así que me pongo a ello y espero hacerlo como corresponde. Y como me enseñaron a mi es que cuando se pide disculpas se hace clarito y sin poner excusas.

Lo primero a quien se lo pido, que no son a otros que a David, Sergio, Hugo y Javi, cuatro de nuestros jugadores de Iniciación que el sábado jugaron su partido en Dominicos. A ellos y a sus padres y madres les pido sinceras disculpas porque como máximo responsable del Club lo soy también de no haber podido hacer que jugaran el partido junto con sus compañeros. Y pido perdón porque creo que son errores que no deberían repetirse los que hicieron que los cuatro fueran los únicos en acudir al partido. Permitirme, eso sí, que haga un pequeño paréntesis para agradecer al Colegio Santa María Reina su comportamiento al cedernos a uno de sus jugadores.



Y es que soy el responsable de que la comunicación a los padres sea clara y precisa en todo momento, para que ellos entiendan a su vez y transmitan a los más pequeños que el deporte en equipo supone la disciplina y el esfuerzo que lleva consigo el compromiso que hacemos con nuestros compañeros. Si no acudimos a un partido estamos perjudicando a nuestro equipo, a nuestros compañeros, y eso debemos evitarlo por encima de todo. Así pues, os pido sinceras disculpas a jugadores, padres y madres y os pido que esta semana atendáis a las medidas que os daremos para evitar que se vuelvan a producir estos errores.

Dicho esto creo que también conviene destacar el partido que jugaron ayer los más pequeños, dirigidos por Adolfo, que disfrutaron como el primer día y jugaron un buen partido, al igual que los benjamines, que demostraron algo más que saber jugar, pues la diferencia de edad con sus rivales no les impidió demostrar un carácter y un valor que nos garantizan muchos años de bue balonmano. Al tiempo.


¿Y los alevines? ¿Pues que queréis que os diga? Que da gusto verles jugar, o basta con oír a sus entrenadores lo orgullosos que están de ellos no solo por cómo juegan si no por cómo entrenan cada semana. Ver como las incorporaciones de este año se van adaptando con una naturalidad y efectividad tremenda es algo que nos ha sorprendido a todos.


Y nuestros “niños grandes” siguen sumando victorias. Las dos últimas frente a Maristas, A y B. Los primeros nos visitaron el pasado fin de semana como líderes y cayeron derrotados, al igual que lo han hecho este fin de semana en su casa los del B. Nuestros muchachos de Cadrete llevan ya cuatro victorias y se colocan a tiro de las primeras plazas, objetivo de una primera temporada en la que el equipo está claramente comprometido a luchar por el ascenso. Verles jugar ya es todo un premio para quienes podemos acercarnos a verles.


Y nuestras chicas, que nos han regalado hoy un auténtico partidazo contra el joven y buen equipo de Dominicos. Un partido en el que hemos disfrutado por el juego y por el ambiente que hemos vivido en el Pabellón de Cuarte. El trabajo de Asier y Cristian con este fenomenal grupo humano está dando muchas satisfacciones al grupo y son un inmejorable ejemplo para nuestros pequeños, que ven en su trabajo y su juego un claro ejemplo a seguir. Solo por eso ya nos vemos más que compensados. Hoy oír a los más pequeños animar ha sido una delicia. Verlas a ellas trabajar, especialmente como lo han hecho en defensa en la primera parte, ha sido genial. Y por cierto, termina la segunda vuelta y lo hacemos en 2ª posición y con ganas de mucho más.

Muchas gracias a todos.




Fdo.: José Forniés Abadía



lunes, 10 de noviembre de 2014

Pequeños gestos que nos harán grandes


Al final, por mucho que uno haga para que las cosas marchen bien son los pequeños gestos los que nos ponen de buen humor o no, los que nos hacen estar a gusto o no, los que en definitiva manejan nuestro estado de ánimo. Y es que uno puede preparar todo con el máximo cuidado posible y un pequeño detalle hacer del momento algo sublime o digno de olvidar.


El deporte, como la vida, está lleno de esos pequeños detalles, pequeños gestos individuales o colectivos que nos hacen disfrutar y crecer. Cuando además estamos trabajando con niños y niñas a los que pretendemos formar los gestos, nuestros gestos, cobran especial importancia pues ellos se fijan y aprenden de ellos mucho más que de nuestras indicaciones. Así que una vez más debemos ser conscientes de que a quienes dirigimos todo nuestro esfuerzo es a quienes debemos enseñar el camino a base de ejemplos, a base de esos gestos que les harán crecer.

Gestos que muestran el comportamiento y la forma de ser de cada uno de nuestros jugadores o de sus monitores, que con suma paciencia saben captar la atención de esos pequeños manojos de nervios y canalizarles la energía hacia el esfuerzo y trabajo en equipo. Y saben hacerlo, doy fe. Cada fin de semana dedico más tiempo a observarles, en la medida que uno puede, su trabajo con los chicos y esa capacidad que tienen para dominar al grupo y transmitirles paso a paso sus enseñanzas. Luego el juego, con el resultado, tiene su importancia. La que tiene y no más. Lo grande, lo que tiene valor deberá transmitirlo el entrenador.


En estas dos semanas hemos tenido gestos. Gestos pequeños, gestos de niños que quieren jugar, que quieren agradar, que quieren aprender. Gestos de adultos, que quieren mostrar su solidaridad con todos aquellas mujeres que sufren por el cáncer, o que quieren luchar por que a las mujeres se les trate por igual también en el deporte. Son gestos de lucha, como los de sus compañeros de Territorial a los que nadie regala nada pero siguen luchando y queriendo aprender cada semana, y sobre todo queriendo luchar cada semana.


Son gestos, algunos no tan pequeños, pero que entre todos harán que poco a poco nos hagamos más grandes, porque vosotros lo hacéis grande a este Club.